Autor: José Manuel Martínez Vázquez (Presidente Club Bonsai Axarquía)
INTRODUCCION
Un tokonoma (床の間) es un pequeño espacio elevado
sobre un washitsu,
una habitación de estilo japonés con piso de tatami, donde se muestran los
objetos más preciados de la casa, entre ellos casi siempre se cuelga un rollo
desplegable con pinturas Kakemono. Otros objetos que se pueden encontrar en los
tokonoma son: Ikebana
(arreglos florales); koro,
quemador de incienso y el recipiente para el incienso o kobako;
Kyobako,
los sutras
(libro de preceptos espirituales budistas), bonsáis
, kusamonos, sitakusas y utensilios de cerámica o porcelana de gran valor.
El tokonoma y los objetos contenidos en él son esenciales
en la decoración tradicional japonesa. Su disposición y apariencia cambiará con
frecuencia: el motivo del kakemono, así como el resto de elementos estarán
relacionados con la época del año, las fiestas, el calendario y el estado de
humor del propietario. Originariamente el tokonoma era el
altar privado de los monjes zen y
consistía en una mesa baja de madera sobre la que se quemaba una vela e
incienso de un recipiente como ofrenda bajo un rollo con caligrafías budistas.
Con el tiempo cambió su significado y con él su apariencia. Las imágenes
religiosas fueron sustituidas por otras más mundanas o por caligrafía
artística, aparecieron elementos de bronce, madera u otros materiales en la
plataforma, junto al incensario y el arreglo floral, aunque estos elementos
nunca llegaron a ser muy grandes o elaborados. Aún así, hace falta no ver el tokonoma
meramente desde un punto de vista artístico. A lo largo de los siglos ha sido
venerado como el lugar sagrado de la casa. Para los japoneses tiene una clase
de significado sagrado o moral, que deriva de sus orígenes sagrados. El espacio
enfrente del tokonoma es el espacio de honor, y nunca se puede entrar a su
interior. Los primeros tokonoma aparecieron al periodo Muromachi (alrededor del 1350) y eran una clase de "hornacina para el culto", largos y estrechos, de una profundidad nunca superior a los
Cuando se encuentran invitados presentes en una habitación
de estilo japonés, la manera más correcta según la etiqueta japonesa es hacer
sentar al huésped más importante dando la espalda al lugar del tokonoma. El
motivo hace falta encontrarlo en la modestia: el que invita no debe hacer
ostentación del contenido del tokonoma al invitado y, por lo tanto, es
necesario no conducir su mirada directamente a este espacio; por otra parte,
éste queda situado en el centro de la escena, enmarcado dentro del espacio más
importante de la habitación.
NUESTRO PROYECTO
Particularmente pienso que toda exposición que se precie
debe llevar un TOKONOMA a la entrada con uno de los mejores árboles. Será la
primera visión que el “visitante” tenga al entrar y la cautivadora belleza del
conjunto le transmitirá paz, armonía e invitará a seguir el “camino” con el
espíritu y la mente abierta…
En la I Muestra Solidaria de Bonsai de la Axarquía no
pudimos disponer de él, pero improvisamos humildemente algo que resaltara ese
olivo centenario que tanto representa nuestras tierras y a la vez diera la
bienvenida al visitante…
Para la siguiente, en la que casi ya estamos, la II Muestra
Solidaria de Bonsai de la Axarquía 2013, nos propusimos contar con un TOKONOMA
en toda regla y a lo largo de este año fui dando forma en mi cabeza a la idea
buscando información aquí y allá y cogiendo ideas para su futura construcción.
Debería de ser robusto y desmontable y que el sistema de
ensamblaje no se deteriore fácilmente con el uso, como ocurre en algunos que he
visto realizados con tablones de aglomerado rechapado ensamblados con
tornillos. Al poco tiempo de quitar y poner tornillos, al final, se acaba
rompiendo el aglomerado y siendo inservible o poco estable.
Así que, siguiendo estas premisas y aprovechando las
experiencias de otros, empecemos con el diseño:
Primero los planos en papel ¡como hacen los buenos
arquitectos! Jajajajajajaja
VISTA FRONTAL (las medidas son en centímetros)
PLANO CENITAL o pa que nos entendamos… visto desde arriba
jejejeje
PLANO ESTRUCTURAL fuera de escala en perspectiva, con
indicaciones de los puntos de ensamblado de los módulos con tornillos pasantes con
rosca y arandela y tubillones (*) de madera de guías:
(*) con tubillones me refiero a una técnica que se usa en
carpintería y que consiste en poner unos cilindros de madera incrustados en la
estructura y que penetra en un orificio en la otra parte a ensamblar para que
el ajuste a la hora del montaje sea más preciso y fuerte:
EL ARMAZON O ESTRUCTURA PRINCIPAL
Obviamente deberá ser la parte más fuerte y quedar
perfectamente escuadrada para que a la hora del montaje todo vaya a su sitio,
no se desforme y no se mueva.
Esta parte, por lo delicado del proceso y su importancia en
el acabado final, decidí que nos la hiciera un profesional, siguiendo los
planos que yo le facilité.
Todos los ensambles de las esquinas de los módulos van
realizados con uniones de caja y espiga similares a las del siguiente dibujo:
Es una unión que una vez encolada queda tremendamente firme
y fuerte
El armazón consiste en cuatro módulos rectangulares en forma
de marcos realizados con listones de madera de pino de 6x3 cm. Aquí desmontado:
Y ya montado:
EL
REVESTIMIENTO EXTERIOR E INTERIOR
Para reforzar el marco horizontal sobre el que irá el tablero
que soportará el bonsai a exponer añadimos un travesaño en el centro de madera
de 5x5 como veis en la siguiente imagen:
Colocamos también un travesaño en la parte trasera superior
que aguantará el panel de revestimiento del fondo y el del techo y para que
siga siendo desmontable como anclaje utilizamos este artilugio de enganche
rápido.
Por la parte interior de todos los marcos colocamos unos
listoncillos de 10x10 mm que sujetaran los paneles de chapon de 3 mm que conformarán el
recubrimiento a modo de las ventanas antiguas de madera para sujetar los
cristales y los vamos claveteando con pequeños tirafondos sin cabeza.
Utilizamos un listoncillo de 3x10 mm para que nos sirva de
guía al ir claveteándolos y que queden todos a la misma distancia de los
bordes.
Aquí podéis ver uno de los módulos con los listones ya
puestos en su sitio. Una cara la claveteamos y la otra esta solo sobrepuesta para
clavetearla una vez introduzcamos el panel correspondiente.
ACABADO
Le damos una o dos manos de Lasur color pino para proteger
toda la madera de pino expuesta. Hemos preferido este tipo de protección mejor
que el barnizado por dos razones. Primero es menos trabajosa su aplicación al
no necesitar lijado entre mano y mano y segundo porque es de poro abierto y así
la madera al conservar su humedad propia se conserva mejor.
Comenzamos el acoplamiento de los distintos paneles de las
paredes, techo, y espalda y así es como va quedando finalmente:
Frente
Parte de atrás
Vista lateral
Elementos para el montaje y ensamblado
Aquí todo desmontado y listo para el transporte…
Como podéis ver en esta foto con todas las piezas del puzle
desmontadas, el marco superior del frente lleva acoplado por detrás una regleta
para un tubo fluorescente de 35W (120 cm ) que iluminará una vez montado toda la
escena principal del tokonoma.
Espero que os haya gustado el brico-consejo jejejeje. Aunque
no es lo más habitual que nos fabriquemos uno de estas dimensiones para uso
particular, el fin de esta publicación es para facilitar a otras asociaciones
que lo necesiten una guía de construcción ya que hay bastante poca
documentación escrita sobre el tema, medidas y diseños.
Esta es la foto final expuesto en nuestra II Muestra Solidaria de Bonsai de la Axarquía
Esta es la foto final expuesto en nuestra II Muestra Solidaria de Bonsai de la Axarquía